El decatleta australiano Cedric Dubler rememora el gesto de generosidad que protagonizó en Tokyo 2020, su nueva carrera como creador de contenido y los consejos que quiere dar a otros atletas que deseen empezar a compartir su historia. Los Juegos Olímpicos tienen una capacidad única para inspirar, y uno de los momentos más recordados de Tokyo 2020 tuvo como protagonista a Cedric Dubler.
Tras convertirse en el primer decatleta australiano en 16 años en competir en los Juegos Olímpicos, en Rio 2016, Cedric superó una lesión de isquiotibiales para participar por segunda vez en los Juegos, en Tokyo 2020.
Aunque ya estaba fuera de la lucha por las medallas antes de la última prueba, la carrera de 1500 m, Cedric tomó la decisión de convertirse en liebre de su compañero Ashley Moloney para ayudarlo a llegar hasta la meta y alzarse con la medalla de bronce.
El gesto de generosidad de Cedric dio la vuelta al mundo, y el Comité Olímpico Australiano luego le concedió el premio Cecil Healy al espíritu deportivo en los Juegos Olímpicos.
Desde entonces, Cedric ha abierto un nuevo camino en la creación de contenido y ha acumulado más de 40 000 seguidores en Instagram y 12 000 en TikTok, donde comparte vídeos cortos sobre su vida.
Cuando Cedric vino a visitar la Casa Olímpica y el Muro de los Atletas Olímpicos, tuvimos una charla sobre aquella carrera en Tokyo 2020, su nueva pasión y sus consejos para los atletas que quieran lanzarse al mundo de la creación de contenido.
Ashley y yo habíamos estado entrenando juntos durante siete años antes de Tokyo 2020.
Lo vi crecer desde que era un joven atleta hasta que debutó en sus primeros Juegos Olímpicos.
Esa conexión hizo que fuera lo más natural acompañarlo hasta la línea de meta.
Recuerdo haber llamado a mis compañeros de entrenamiento que estaban en Australia para preguntarles qué debía hacer y cómo marcarle el ritmo.
Lo arropé, lo guíe… y el resto es historia.
El apoyo lleva al éxito
Apoyar a los compañeros y luchar por el éxito propio van de la mano. El aforismo «Una marea alta levanta todos los barcos» lo resume a la perfección.
En Brisbane, teníamos un entorno de entrenamiento increíble en el que entrenaban algunos de los mejores decatletas del mundo.
No se trataba nunca de enfrentarse uno contra otro. Competíamos, pero siempre con la idea de ayudarnos mutuamente a alcanzar nuevas metas, y es así como alcanzamos el éxito.
Una vía para expresar mi creatividad
Empecé a crear contenido porque quería aprender a contar mejor mi historia y me pareció la forma más sencilla de hacerlo.
Además, era un modo de aprender a hablar frente a los medios y dar salida a mi creatividad. Siempre he disfrutado muchísimo de expresar mi creatividad.
Hoy, se ha convertido en una parte esencial de mi vida como atleta. Espero que mi contenido inspire a otras personas y derribe algunos de los mitos sobre el deporte.
Mis vídeos muestran el camino que he transitado con la mayor transparencia posible. No se trata de mostrar solo los momentos de gloria, sino también las etapas difíciles en la que no estás bien, pero, aun así, puedes conseguir tus objetivos.
Creo que esa honestidad ha generado interacciones muy auténticas con mi comunidad.
